Top Gun miramar
- Redactor
- 2 ago
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Alta relojería en clave de precisión táctica.

Por un cielo sin límites, por la ingeniería elevada a la poesía de los materiales. Por una estética que no teme romper la barrera del sonido cromático. Así es el nuevo Reloj de Aviador Cronógrafo 41 TOP GUN Miramar de IWC Schaffhausen, una oda cerámica a la excelencia funcional con alma militar y visión futurista.

TOP GUN no es solo un nombre; es una declaración de principios. Desde 2007, IWC ha elevado su colección de relojes de aviador a una nueva dimensión de resistencia y estilo inspirada en la legendaria escuela de vuelo de élite de la Armada de EE. UU., la United States Navy Strike Fighter Tactics Instructor Program. La colección TOP GUN encarna ese equilibrio exquisito entre funcionalidad táctica y diseño contemporáneo, entre materiales innovadores y herencia aeronáutica.
Aquí no hablamos de relojes que solo se ven bien, hablamos de instrumentos concebidos para los desafíos más extremos del aire, ahora refinados con un lenguaje de color y técnica que roza el arte.

En su último despegue hacia la innovación, IWC presenta el Reloj de Aviador Cronógrafo 41 TOP GUN Miramar, bautizado con el nombre de la base naval californiana donde empezó la leyenda. Este modelo celebra un nuevo color cerámico desarrollado junto a Pantone®, un azul celeste que recuerda a las camisetas que visten los instructores TOP GUN bajo sus trajes de vuelo. No es solo un tono, es una insignia de mérito.
La caja de cerámica azul claro, combinada con la esfera y la correa de caucho del mismo tono, logra una armonía visual sin precedentes. Esta edición limitada a 1.000 unidades (ref. IW389409) es, en esencia, un objeto de culto para coleccionistas con vocación de altura.

¿Y qué hay dentro?
El calibre de cronógrafo IWC 69380, con rueda de pilares, cuerda bidireccional y 46 horas de autonomía. Un corazón suizo entrenado como piloto de combate, es preciso y fiable, incluso en la cabina de un F/A-18 Hornet.

Crear cerámica coloreada no es un simple ejercicio de pigmentación, es una coreografía científica. Para lograr este azul celeste, IWC ha mezclado óxido de circonio con óxidos metálicos en proporciones exactas, venciendo la volatilidad cromática que ocurre en la sinterización —ese punto crítico donde la materia decide en qué se va a convertir—.
Más desafiante aún fue igualar ese mismo tono entre tres materiales radicalmente distintos, la cerámica de la caja, la esfera y el caucho de la correa. Solo una manufactura con una visión integral del diseño podía lograrlo.

IWC no se detiene ahí, por primera vez, introduce un color Pantone® en un reloj de acero inoxidable con el Cronógrafo 41 TOP GUN Miramar IW388117. La esfera y la correa en tono celeste contrastan con una caja en acero pulido de 41 mm, un tamaño perfecto y equilibrado. Las agujas chapadas en rodio, rellenas con Super-LumiNova®, garantizan visibilidad en cualquier altitud.
Este modelo ofrece fondo de zafiro transparente, permitiendo observar el calibre en acción como si fuera el panel de instrumentos de una cabina.

Ambos relojes incluyen, el movimiento automático 69380 con sistema de rueda de pilares, reserva de marcha de 46 horas, diseño de cronógrafo vertical, con minutos a las 12 para una lectura más intuitiva. Protección antimagnética en el modelo de cerámica (jaula interna de hierro dulce), también incorpora el sistema EasX-CHANGE®, para cambiar la correa sin necesidad de herramientas, de una manera rápida y eficaz.

IWC no solo vuela alto en términos de innovación, sino también en responsabilidad. Desde hace años lidera la conversación sobre sostenibilidad en la alta relojería, trazabilidad de materiales, eficiencia energética, reducción de residuos, y colaboración con causas sociales, especialmente en la educación de niños y jóvenes a escala global.
Porque diseñar un reloj que dure generaciones no es solo una cuestión técnica, es también ética.

El nuevo TOP GUN Miramar no es un simple lanzamiento; es una proclama estética que mira al futuro con los pies firmes en la pista de aterrizaje de la tradición. Es el tipo de reloj que uno no solo luce, sino que encarna. Una fusión entre precisión militar, belleza cromática y la historia viva de una manufactura que lleva más de 150 años escribiendo el tiempo con pulso firme.
Porque hay relojes que miden el tiempo y otros, como este, que lo desafían.