ZHEN, el nuevo faro de la alta cocina asiática en Madrid
- Redactor
- 29 oct
- 3 Min. de lectura

El restaurante es un manifiesto gastronómico que posiciona la nueva Castellana como corredor estratégico del lujo culinario asiático. Zhen —la nueva joya del grupo Dragon Taste— desembarca en Madrid con la ambición serena de quien lleva tres décadas conquistando paladares, 200 restaurantes en Europa y una visión empresarial que entiende la gastronomía como cultura, negocio y emoción.

Al cruzar sus puertas, uno percibe esa mezcla precisa entre hospitalidad china, sofisticación internacional y un pulso contemporáneo que lo convierte en benchmark inmediato del sector.

Un coloso culinario para conocer China de norte a sur
Dragon Taste presenta aquí su buque insignia, un concepto total que abraza las cuatro grandes cocinas chinas —Cantón, Shanghái, Pekín y Sichuan— y las traslada a un restaurante de tres alturas, con capacidad para 300 comensales entre salones, barras y ocho reservados que huelen a reuniones estratégicas, celebraciones importantes y experiencias de negocio de primer nivel.
En sus primeros días, ya es punto de encuentro natural de la comunidad china en Madrid y eso, en gastronomía asiática, es más que un KPI, es una validación cultural.
La carta es un mapa sensorial que atraviesa ríos, mercados, montañas y ciudades milenarias. Entre sus imprescindibles se encuentran algunos como:
Pato Pekín asado con leña de frutas, elaborado en un horno propio, con esa piel crujiente que suena a seda cuando se corta.
Costillitas de cerdo ibérico en salsa de ciruela, el encuentro perfecto entre técnica ancestral y producto español premium.
Lotus relleno de arroz glutinoso con miel y flores, pura poesía vegetal.
Dim sum artesanales, delicados, precisos, hechos a mano. Berenjena con salsa de ajo, un clásico que en Zhen adquiere una finura inesperada. Salteado campestre imperial, que combina loto, oreja de madera, tallos verdes y camarones secos: la China rural elevada a alta cocina. Jabalí con guindilla picante y panecillos de cereales, un plato que cuenta historias de caza y montañas. Foie gras en matsutake, fusión elegante entre lo terrenal y lo boscoso.
Pera estofada con azúcar de roca, postre minimalista, etéreo y perfumado. Para cerrar, té tradicional chino, un ritual de bienestar que funciona como firma final del viaje.
Con tickets medios desde 35 € y menús de grupo a partir de 50 €, Zhen equilibra accesibilidad estratégica con alto valor gastronómico. Además, ofrece un menú del día de ejecutivo por 19,50 € que es casi una declaración de principios: excelencia diaria sin fricciones. El interiorismo —firmado por un reconocido diseñador chino— despliega un lenguaje estético lleno de símbolos: farolillos que narran historias, escenas tradicionales pintadas como haikus visuales, picaportes-dragon que custodian las paredes, una barca varada entre mesas como metáfora del viaje perpetuo.
El resultado es un ecosistema sensorial donde cada detalle importa, desde las finas
vajillas, a las mesas vestidas con elegancia clásica, luz indirecta que abraza, cavas de vino presidiendo el pasillo central con 130 referencias internacionales y una selección de licores chinos para entendidos.
Los ocho reservados privados —para 7 a 20 personas— aportan ese valor diferencial tan necesario en el mercado corporativo madrileño. Espacios donde sellar acuerdos, celebrar hitos o simplemente sorprender.
Los socios fundadores, Guo Xu Jianyong (Go Sushing, Ramen Shifu, Dragon Kitchen, Xiaolongkan Hotpot) y Luis Chen (Sumo, Wok Garden), son ejecutivos con una visión clara de expandir la gastronomía china auténtica sin renunciar a la excelencia operacional ni a la emoción cultural. Zhen es un restaurante que no solo da de comer, sino que educa, inspira y conecta.
En un mercado saturado de propuestas asiáticas, Zhen se posiciona como un nuevo estándar, un proyecto donde la autenticidad es estrategia, la estética es narrativa y la cocina es un puente cultural que abre Madrid hacia un Asia profunda, sofisticada y vibrante.
Un lugar al que se viene para celebrar, descubrir y recordar. Un viaje que, como todo lo importante, empieza con un simple paso, para cruzar la puerta de ese buque insignia que ya está marcando tendencia.
Restaurante Zhen
Paseo de la castellana, 179















































